Las formas más comunes de uso de los aceites esenciales son:

  1. INHALACIÓN: La vía olfativa es una de las más interesantes a la hora de gestionar las alteraciones emocionales: el estrés, la ansiedad, el miedo… Disfrutando de la sensación del olfato inhalando directamente de un bote, a través de un difusor, con un stick nasal con un difusor ultrasónico o un nebulizador…
    Podemos elegir los aceites esenciales en función de diferentes criterios:

    • Para favorecer el sueño: Oler aceites tranquilizantes justo antes de dormir, como lavanda, mandarina, manzanilla romana, yuzu o petit grain; o bien podemos echar unas gotas de aceite esencial de lavanda o de esencia de naranjo amargo en la almohada.
    • Para reducir la ansiedad: Lavanda, incienso, jazmín…
    • Para mejorar el rendimiento, la concentración, la memoria y la creatividad y, al mismo tiempo, reducir el nivel de estrés: Romero cineol, ravintsara, limón, menta piperita, albahaca exótica, pino silvestre, neroli, palo de rosa, lavanda…
    • Para estimular nuestro sistema inmunitario contra las enfermedades más comunes del invierno, protegernos de la gripe, resfriados y otras infecciones respiratorias: El ravintsara, el saro o mandravasarotra, el eucalipto radiata, el limón…
    • Para el dolor de cabeza: La menta piperita o la ravensara aromática.
    • Para facilitar la digestión: Manzanilla romana, estragón, hinojo, anís estrellado…

    Y, así, para un sinfín de posibilidades.

  2. MASAJE: Absorción por la piel. Se trata de la aplicación de aceites esenciales sobre un soporte de aceite vegetal para utilizarlo con fines terapéuticos, ya sea a nivel esquelético, circulatorio, drenante, nervioso, emocional…
  3. EN BAÑERA: Una deliciosa manera de disfrutar de los beneficios de los aceites esenciales, especialmente para combatir el estrés y el cansancio y para fortalecer el organismo en general eliminado toxinas.
    Algunas sugerencias de aceites esenciales para baños aromáticos:

    • Para un efecto relajante y antiestrés: bergamota, mandarina, naranja, pomelo, limón, geranio de Egipto, lavanda, lavandín, ylang ylang, mejorana, yuzu…
    • Para recuperar fuerzas o en caso de cansancio y de resfriado: romero cineol, ravintsara, saro o mandravasarotra, eucalipto radiata…
  4. INGESTA: Solamente usaremos los aceites esenciales quimiotipados definidos terapéuticamente.
  5. DISPOSITIVOS INTRAVAGINALES: Se pueden usar óvulos de farmacia.
  6. SUPOSITORIOS: Para añadir aceites esenciales.